Binoculares

OPINIÓN 18/12/2014 05:00 Actualizada 05:00

Al "Profe" le vale la militancia 

Acostumbrado a las jugadas sucias y sin reparar en el daño que le causa a su partido, René Bejarano cuentan que anda desesperado porque en Azcapotzalco de nada le sirvió tener durante cinco administraciones el aparato delegacional, ni tampoco el impulso que pudieran tener los tres diputados de su corriente en esa demarcación, pues un solo grupo, Fuerza Democrática, lo derrotó para alcanzar la presidencia del Comité Ejecutivo Delegacional. En su desesperación por ganar en la mesa lo que ya no puede con los votos, Bejarano negoció ceder lo poco que tiene en Tlaxcala, para intentar mantener el control en Azcapotzalco. Y es que a ‘El Profe’ lo que decida la militancia le queda corto y al paso que va su negociación, parece que ni Carlos Navarrete intervendrá, aunque sabe que ahorita en su partido ‘el horno no está para bollos’.

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Valencia y el antidoping

En el año 2012, cuando fue electo como delegado en Iztapalapa, Jesús Valencia aceptó practicarse una prueba antidoping, de la que salió bien librado. Hace unos meses, el mismo Velencia pidió a sus funcionarios que se realizaran una prueba para comprobar que estaban limpios de sustancias y la PGR fue la encargada de realizarlas. Ayer, Valencia sufrió un percance en el Pedregal, ahí donde vive, donde está su casa, muy lejos de Iztapalapa donde nació, y más cerca de la Narvarte donde vivió mucho tiempo. Bueno, dice su equipo que se accidentó porque andaba agripado y, además, el delegado trabaja mucho. En varias entrevistas, Valencia dio diferentes versiones; seguro eso también fue producto de la gripe y el medicamento que provocan que se confunda en espacio y tiempo. ¿Será que si se hubiera hecho un antidoping a unas horas de que chocó, sólo habrían hallado rastros de medicina?

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