Sin medir las consecuencias, así viven y sienten la lucha libre los estetas que desgastan sus ilusiones en las arenas independientes; a veces les cuesta caro.

Hace un par de semanas se celebraba en la arena San Juan el primer aniversario de la promotora Kamicazes del Ring, y dentro de una jaula un puñado de valientes se apostaban máscaras y cabelleras.

La batalla transcurría de forma normal. En esa ocasión, los protagonistas daban un buen combate hasta que un accidente cambió el panorama e impactó al respetable.

Danger King subió a lo más alto del enrejado, buscaba la gloria y encontró en el camino un rival complicado de sortear, muy cercano a la desgracia.

Una severa lesión en la rodilla lo puso contra la lona por varios meses. Fracturado del alma, salió del lugar con la incertidumbre de un futuro en el que pocos piensan y casi todos evaden.

Con el sueño roto por esa noche, el nuevo día le deparaba al gladiador el problema de cómo encarar una operación inevitable, costosa y desgastante. Echar mano de un seguro es algo impensable en un medio en el que la prevención suele ser apabullada por la inestabilidad y el abandono.

La solidaridad, aplaudible, surgió por todos lados, pero ojalá que esa unión busque un efecto contundente en la realidad de los gladiadores.

Es algo por lo que deben luchar los protagonistas de este deporte espectáculo, no contra los empresarios necesariamente, más bien contra el desinterés del propio gremio por trabajar en mejores condiciones.

Promover lucha libre no es sencillo pero caminar sobre el fango en busca de un sueño llamado lucha libre es aún más complicado.

Confiar en las comisiones encargadas de proteger y regir a este deporte suena a utopía. Viven preocupadas por cobrar los “viáticos” para sancionar cada evento, o invirtiendo tiempo en bloquear espacios donde la lucha independiente se mueve. Son mafias que trabajan en la impunidad. 

Es tiempo que los luchadores, sobre todo los independientes se ayuden, que no esperen que las o los estrellas tomen la batuta, ellos ya van de salida. El reto es para los que apenas inician y tienen mucho camino por recorrer.

 Buenas luchas!