Es su fiesta

Gabriel Cruz

OPINIÓN 17/04/2018 12:30 Gabriel Cruz Actualizada 12:30

HOY en día los ídolos son tan terrenales como prescindibles. Alcanzan una noche el estrellato y lo tiran a la siguiente semana, su fuerza es tan virtual como las redes sociales en las que el aficionado se acerca a ellos, los alaba y les hace creer que son lo que le hacía falta a la lucha libre para resurgir. 

Así que héroes de carne y hueso como Mr. Niebla, con todos sus defectos y errores, sobreviven ante las nuevas generaciones que es probable ya no existan sobre el cuadrilátero, en unos años. Son tan efímeros como mal preparados y por eso son ídolos de papel que lastiman a la lucha libre. 

Niebla celebrará 25 años como luchador profesional, una aventura enmascarada plagada de triunfos, brillo e idolatría, que celebrará con los suyos. Los que lo acogen en el barrio como cuando era niño y sus travesuras no tenían consecuencias.

Hace varios años que libra una batalla interna contra sus propios monstruos. No los oculta ni esconde sus caídas. Reconoce sus fallas y sabe que se han convertido en los rivales más difíciles de vencer, pero cuando la fiesta le gana, poco puede hacer.

Con motivo de su función de aniversario, tuve la oportunidad de acompañarlo a caminar por las calles y recorrer el lugar elegido para la fiesta. Al hacerlo, es imposible no reconocer que con o sin máscara, el ídolo no muere. Lo mismo los señores reunidos en el parque, que los vecinos que se encuentra a su paso alimentan su figura, su historia.

Algunos se sienten más cercanos y lo llaman por su nombre, por respeto. Un claxonazo por aquí, un chiflido por allá, las calles que corrió en busca de sus sueños ahora lo sienten arriba de su camioneta, pero él es el mismo: noble y entregado a su terruño.

De Mr. Niebla se podrá decir mucho. Pero se trata de un personaje tan real que no requiere de mayor reconocimiento del que ya se ganó, ése que lo mantiene de pie y con la esperanza de seguir vigente. 

Su combate más cruel no está en las arenas, pero lo enfrenta y tiene razones para salir ganador. El sábado en el deportivo Pavón celebrará para bien o para mal. Cualquier cosa podrá ocurrir con él.

¡Buenas luchas! 

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