Parece un juego, pero…

OPINIÓN 16/06/2015 05:00 Actualizada 05:00

El video de Amanda Todd en YouTube, en el que relata la historia de chantajes, acoso escolar, ciberacoso y agresión física a la que otros estudiantes la sometieron, y que la llevó al suicidio, alcanzó más de medio millón de visitas en tan sólo un mes.

El ciberacoso o ‘ciberbullying’, lo mismo que el acoso escolar, es una dramática realidad a la que se enfrentan a diario millones de chicos y chicas en el mundo; sus repercusiones pueden afectar su bienestar, su desarrollo, pero definitivamente atenta contra sus derechos humanos, en especial el más importante: el derecho a la vida digna.

A pesar de los esfuerzos que se hacen desde la sociedad civil para combatir esta práctica, ni en México ni en muchos otros países ha sido suficientemente atendida, ni por el derecho o la política, ni por las ciencias, sean éstas sociales o exactas.

Un estudio de la Universidad de New Hampshire, aplicado a 791 jóvenes de entre 10 y 20 años (51% mujeres), reveló que más de la mitad considera muy perjudicial y, por lo tanto, más temido, el acoso tradicional o ‘bullying’ que el ciberacoso, del cual sólo 15% lo señaló como preocupante. Sin embargo, cuando se les preguntó qué opinaban del llamado acoso mixto —que incluye ambos tipos—, 31% de los encuestados lo consideró más temido y doloroso que cualquiera.

La violencia ha despertado el interés e, incluso, la fascinación del género humano desde sus inicios, que hoy se magnifica con la visibilidad que los medios masivos y las redes sociales le imprimen; sin embargo, no es exclusiva de nuestra especie: se presenta también en simios y en otras especies animales. No somos la única especie violenta, tampoco la única que mata por placer; esos son mitos que la ciencia ha derrumbado.

Darwin sugería ya en el siglo XIX que las conductas agresivas entre humanos cumplen las mismas funciones que en otras especies: regulación social, expansión territorial y defensa del grupo. Mientras que Freud, 50 años después, mostró que detrás de todo acto violento o amoroso prevalecen cálculos inconscientes de pérdida o ganancia.

Hoy martes, a mediodía, en el Museo de Ciencias Universum se presenta el preestreno de la obra teatral Ciber@coso, que aborda de una manera sencilla y clara esta problemática eminentemente juvenil. La función se podrá seguir en tiempo real a través de la señal: http://webcast.unam.mx. No se la pierda.

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