La trata, delito cruel e inhumano II

OPINIÓN 16/04/2013 01:00 Actualizada 01:00

La trata es un problema internacional que tiene como víctimas a las personas más marginadas de todo el mundo. Mediante engaños o coacción, criminales y redes delictivas hacen caer a las víctimas en una espiral de violencia, degradación y enfermedad de la que es difícil escapar. A los ojos de todos, bajo el manto de la indiferencia y la corrupción, la trata es el tercer delito que genera más ganancias después del tráfico de armas y las drogas.

De acuerdo con el Reporte mundial sobre tráfico de personas 2012, 27% de las víctimas de trata en el periodo 2007-2010 son niñas y niños, 7% más que en el periodo previo (2003-2007). Del total de niños, alrededor de 75% son del sexo femenino.

El traslado

Después de ser enganchadas, las víctimas son llevadas lejos de su lugar de origen dentro o fuera del país. Las fronteras se cruzan de forma legal o clandestina, incluso con la cooperación de la víctima, que confía en obtener el trabajo prometido. Una vez que llegan a su destino, se les recogen documentos y pertenencias y se les obliga a trabajar. Cuando se atraviesan las fronteras de un país con documentos falsos o de manera ilegal, es más difícil seguir y encontrar a una persona ya que prácticamente desaparecen sin dejar huellas.

La explotación

En África y Asia, la trata es principalmente para trabajo forzado, mientras que en Europa y América lo más común es la explotación sexual. De acuerdo con un reporte de la embajada de Estados Unidos de América, se esclaviza a mujeres y niños mexicanos con fines sexuales tanto en México como en el país vecino.

Así mismo, hombres, mujeres y niños mexicanos son sometidos al trabajo forzoso en la agricultura, el servicio doméstico y la construcción, o pueden ser obligados a mendigar en las calles de México y en Estados Unidos. En los últimos años también hay informes de las organizaciones de la sociedad civil sobre grupos delictivos que obligaron a menores y migrantes a prostituirse y trabajar como sicarios, vigilantes y contrabandistas de drogas.

En el sur de México, hombres, mujeres y niños de Centroamérica, principalmente de Guatemala, son obligados a trabajos forzosos en agricultura, servicio doméstico, ventas ambulantes y a mendigar. El turismo sexual crece en las zonas de Acapulco, Puerto Vallarta y Cancún, y en las ciudades fronterizas como Tijuana y Ciudad Juárez. Si bien no todos los casos de prostitución, turismo sexual o abuso infantil son de trata, los porcentajes pueden ser altos según el país o la región. En Europa, se cree que hasta una de cada siete trabajadoras sexuales vive esclavizada en la prostitución.

El fenómeno de trata es muy complejo y aún las víctimas que son explotadas en lugares abiertos y tienen contacto con la sociedad guardan silencio sin pedir ayuda. Lo anterior, porque los tratantes usan la violencia física, psicológica o sexual para evitar que escapen, por ejemplo, las amenazan de muerte a ellas o sus familiares queridos, de ser deportadas o enviadas a prisión, las presionan con supuestas deudas, las aíslan socialmente como cuando las llevan a un país en el que se habla otro idioma o les suministran alcohol o drogas, práctica cada vez más frecuente.

La próxima semana, la última parte de esta serie con la prevención y atención de la trata.

Cuida tu salud.

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