Binoculares

OPINIÓN 15/09/2014 05:00 Actualizada 05:00

RECULA La semana pasada, en un extraño movimiento el presidente de la Comisión de Gobierno, Manuel Granados, decidió que sería la diputada bejaranista Ariadna Montiel, quien respondería el segundo Informe del jefe de gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera; aquello cimbró parte de los acuerdos que tenían desde el Palacio del Ayuntamiento con legisladores locales, a partir de la elección interna del PRD. Pero parece que alguien recomendó a Granados que reparara su error, pues de lo contrario las batallas al interior del PRD pudieron haberse detonado, y se optó por que sea la diputada Dione Anguiano, quien fije la postura de PRD el próximo miércoles, cuando Mancera acuda al recinto de Donceles y Allende.

¿BEJARANO ACUSA? Este fin de semana la Corriente Izquierda Democrática Nacional celebró su Asamblea Nacional, en dicho evento su líder, René Bejarano, lanzó un mensaje con el que pareciera que busca “coquetear” con el líder de Morena, Andrés Manuel López Obrador, una vez que se siente perdido al interior del sol azteca, además de que algunos seguidores del tabasqueño, de los más fieles, acudieron al evento. Ahí, Bejarano despotricó contra sus compañeros de partido y dijo que luchará contra ellos pese a estar dentro del mismo. Y es que si bien no le parece cómo está conformada la izquierda, no se anima a dejar de seguir viviendo del presupuesto y los recursos que le tocan por ser parte del PRD.

SE ACABÓ LA FIESTA Quienes decidieron adelantar los festejos patrios fueron empleados de la PGJDF adscritos a la Coordinación Territorial Iztapalapa 6. Resulta que el viernes pasado, en la oficina del procurador Rodolfo Ríos, se recibió una llamada anónima en la que denunciaban que el personal de esa agencia estaba de fiesta y no atendía a los ciudadanos. De inmediato, se ordenó una inspección por parte de la Visitaduría y la Contraloría. Cuando esos funcionarios llegaron, encontraron a algunos peritos y empleados ministeriales bebiendo cervezas y botellas de licor. Aunque no fueron presentados ante la Fiscalía Especial de Servidores Públicos, a todo el personal que estaba de guardia se le inició un proceso administrativo.

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