La movilización frenó el IVA a medicinas y alimentos

OPINIÓN 13/09/2013 05:00 Actualizada 05:00

La movilización de Morena celebrada el pasado domingo fue todo un éxito, es la manifestación ciudadana más numerosa en defensa del petróleo y logró frenar el plan para imponer IVA en medicinas y alimentos contenido en la propuesta de Peña Nieto y el PRI.

Pese a que se trate de confundir a la gente mediante un discurso de conciencia social lo cierto es que el PRI y el gobierno federal contemplaban golpear a la ciudadanía mediante el gravamen a medicamentos y comida. Tan es así que el Revolucionario Institucional reformó sus documentos básicos para poder afectar a la población con esa medida.

Sin embargo, es importante destacar que pese a que la propuesta de reforma hacendaria no contiene impuestos a medicinas y alimentos sí contempla el cobro de impuestos a los servicios educativos, al crédito y alquiler de vivienda, así como al llamado transporte foráneo y a la mayoría de actividades culturales y de esparcimiento.

Asimismo, desaparecería el régimen de pequeños contribuyentes, lo que afectaría a negocios como las tienditas o a productores agropecuarios que dejarían de pagar 2% o cuota fija y pasarían a pagar 32% de sus ganancias. Además, en la zona fronteriza el IVA pasaría de 10 a 16 por ciento.

Hasta los servicios funerarios pagarían nuevos impuestos si se aprueba el plan de Peña Nieto y el PRI. Las mascotas tampoco se salvarían, ya que se contempla imponer IVA a sus alimentos.

Como podemos darnos cuenta, no es cierto que con la reforma hacendaria de Peña Nieto se afecte a quien más tiene. Se da un golpe severo a la clase media, media baja y popular, así como al pequeño y mediano empresario.

El aumento a la tasa del ISR afecta a la clase media, y al empresario común, pero al gran empresario se le pueden seguir condonando impuestos, como sucedió recientemente con una empresa televisora.

La reforma no es otra cosa que un aumento de impuestos y se debe a la pérdida de ingresos prevista por la privatización del petróleo. No es cierto que este incremento fiscal sea para establecer el seguro de desempleo y la pensión a adultos mayores. Es para tapar el boquete que se originaría si se entrega nuestra industria petrolera a manos privadas.

De otra manera, no es necesario ningún incremento a los impuestos. Si el gobierno en verdad quisiera beneficiar a la sociedad, si no hubiera doble fondo en sus propuestas, pondría en marcha un plan de austeridad en la cúspide del Estado y de la clase política. Si se eliminan privilegios como el costoso avión presidencial y se reducen sueldos a altos funcionarios de los tres poderes y órganos autónomos y se eliminan gastos superfluos y privilegios se podrían obtener 300 mil millones de pesos sin necesidad de afectar a la población vía impuestos.

El objetivo de la propuesta hacendaria de Peña Nieto es que sea la gente la que pague la privatización de la renta petrolera y, al mismo tiempo, que siga sosteniendo los altos niveles de vida de la clase política. No hay que dejarse engañar.

Comentarios