¿Te da miedo que te manden a volar?

OPINIÓN 13/08/2013 05:00 Actualizada 05:00

Una fobia es un miedo irracional y excesivo ante algo que no representa un peligro para la integridad física. Hay animales, como las arañas y las serpientes, que provocan temor desproporcionado. Las situaciones, como ir al dentista, manejar o volar, también producen estados de angustia intensa.

Una fobia muy común es el temor a volar. Hay personas que, incluso unos días antes de abordar un avión, experimentan los síntomas que acompañan a la ansiedad: aceleración del ritmo cardiaco, sudoración, náuseas, inquietud constante, insomnio, entre otros. Los temores más comunes de la persona aerofóbica son: perder el control dentro del avión, ponerse histéricos, tener un ataque de pánico por no poder salir del avión (claustrofobia) y estar en las alturas, sin algo firme en que apoyarse (acrofobia). Pero el temor principal es a que el avión se pudiera caer. Es un temor a estar indefenso y pasivo, sin ningún control sobre la situación.

¿De dónde surge la aerofobia?

Aunque el temor a volar se origina en vivencias muy personales, he aquí algunas ideas sobre el origen de esta fobia. El famoso psicoanalista norteamericano Leopold Bellak afirma que para algunos, la sensación de elevarse por los aires tiene un significado sexual relacionado con la idea de la erección. Así, la persona aerofóbica teme a sus propios instintos sexuales o a la manifestación de éstos en otras personas. En el ambiente cerrado y constreñido del avión, la cercanía física con otras personas también podría desencadenar una reacción de angustia extrema. Esta podría ser otra manifestación de un temor oculto a la sexualidad.

Otra explicación, desde la terapia cognitiva, incluye a las experiencias traumáticas: un aterrizaje forzoso, turbulencia, bolsas de aire. En este tipo de situaciones, por falta de información sobre lo que puede ocurrir durante un vuelo, algunos dan por hecho que el avión está en caída, cuando en realidad sólo se trata de una bolsa de aire. Basta con una sola experiencia que perciban como amenazadora para relacionar de ahí en adelante al avión, o estar en el aire, con la angustia que sintieron. A partir de entonces, el aerofóbico da por hecho que la situación incómoda que experimentó se repetirá en cada vuelo que tome. A partir de entonces, genera una fuerte angustia ante la posibilidad de tener otra vivencia angustiante como la anterior.

La fobia a los aviones puede surgir también de la interpretación errónea que hacemos de la información en los medios de comunicación. El amarillismo con que se tratan algunos accidentes aeronáuticos, con la repetición constante de imágenes, contribuye a esta visión catastrófica. Cuando escuchan acerca de un accidente aéreo, muchas personas deciden que "ni aunque estuvieran locos" se suben a un avión. Esto se deriva del pensamiento irracional de que "los aviones siempre se caen" o de que "hay muchos accidentes aéreos". Es sabido que volar es uno de los medios de transporte más seguros, más seguro incluso que viajar por carretera.

Además de las anteriores, una causa de la aerofobia está en "el contagio" de temores entre los miembros de la familia. Muchos temores se transmiten de generación en generación. Así, si se tienen padres aerofóbicos, siempre existe la probabilidad de que los hijos, por imitación, adopten actitudes de rechazo hacia los aviones.

La aerofobia es tratable mediante la terapia cognitivo-conductual, hipnosis y terapia psicoanalítica. Muchos superan sus fobias. No permitas que el miedo a estar en el aire limite tu libertad para desplazarte y conocer otros lugares y personas.

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DATO INTERESANTE:
En México, los trastornos más comunes son los de ansiedad. Entre ellos, las fobias específicas afectan al 7.1% de la población. (Encuesta Nacional de Epidemiología Psiquiátrica)

RECOMENDACIONES:
Cómo vencer el miedo a volar
Autor: Debbie Seaman
Editorial: Punto de Lectura
Sinopsis: Esta práctica guía puede ser un punto de partida para los que quieren superar su miedo a volar.

CITA:
"El miedo siempre está dispuesto a ver las cosas peor de lo que son"
TITO LIVIO, HISTORIADOR ROMANO

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