El truene de Laura Bozzo así, del precipicio

Gil Barrera

OPINIÓN 10/07/2017 13:16 Gil Barrera Actualizada 13:16

Escuché hablar a Laura Bozzo de su separación de Cristian Zuárez (sí, así lo escribe con Z) y además de escuchar a una mujer lastimada por la traición de su pareja, por primera vez la percibí vulnerable.

No debe ser fácil ser pareja de Laura Bozzo, su “enfermedad” de estar trabajando todo el tiempo fue el primer enemigo de la relación, sin olvidar que Zuárez era 27 años menor que ella y si bien en el amor no hay edad si tiene tiempo de vigencia, duraron 16 años. Cristian aprovechó que Laura no puede entrar por tener antecedentes penales tras el asunto de Montesinos en Perú y se echó una canita al aire con otra mujer mayor.

No es un secreto que Cristian aprovechaba cada que Laura se distraía para coquetearle a alguien, tampoco que el “gaucho” compraba con el dinero de novia, trajes y zapatos de más de 30 mil pesos mismos que retiró de su casa este fin de semana. Quienes los conocen, saben que la pareja estaba atada por la voluntad de Laura, pero que los caprichos del galán eran el candado perfecto para seguir juntos.

Su última aparición pública fue en la boda de Eruviel Ávila con María Irene Dipp y todavía se les vio juntos en Televisa San Ángel, tres días antes de que la televisión peruana destapara las fotos de la infidelidad de Cristian, motivo por el que se separaron.

Laura puso todo su empeño por complacer a Cristian, le apoyó en todo lo que quiso desde hacerlo cantante hasta productor de sus programas. Pasó por alto los rumores de que Zuárez tenía un romance con una chica de su producción, incluso hasta el día que se le relacionó con su hija menor.

Aunque Laura ha mantenido cordura y está firme al no hablar nada del “desgraciado” lo que realmente tiene calmada a la conductora es el lanzamiento de su próximo programa, sabe que cualquier error pone en riesgo de su carrera, incluyendo el que esto sea un montaje para recuperar la fama perdida, porque es un hecho que Laura, Cristian o el público podrían perdonar una infidelidad, pero no la deslealtad.

Todo listo para que Gustavo Adolfo Infante arranque su nuevo programa de espectáculos en Imagen. Ya tienen completo el equipo de reporteros, conductores y la sorpresa será la incorporación de Mónica Noguera.

Tal parece que nuestros cuates de la Procu del DF deberán contratar reporteros de espectáculos en lugar de judiciales, pues mejor ellos encontraron primero al papá del hijo de Ninel Conde, Giovani Medina que ni los mismísimos ‘judas’. Los hábiles reporteros dieron con el paradero del ex del bombón asesino cuando aún tenía vigente una orden de aprehensión y le sacaron “la sopa”. En sólo dos entrevistas, Medina aprovechó para hablar mal de la mamá de su hijo, dejando claro que eso de la caballerosidad nomás no se le da. Ya Dulce había dado una cátedra de las patanerías del joven y se hicieron evidentes con el paso del tiempo. Giovani se fue por la puerta fácil prefirió hacer chisme, al tiempo en que según Ninel dejó de cumplir como hombre a las necesidades de su hijo. 

De acuerdo a la actriz se avecina una bronca en tribunales pues va con todo para que se haga responsable. Sobre su situación jurídica hay un misterio, al tener una orden de aprehensión por fraude anduvo como Juan por su casa y jamás le echaron el guante. Aunque dicen que logró brincar la bronca de la presunta defraudación, gente cercana a Medina asegura que el chaparrito presumía que dos picudos de apellidos Ríos y Granados lo protegían ¿será?

Bien decía Sergio Mayer que en su ‘Sólo para mujeres’ iban a bailar “chavorrucos” y lo cumplió, seis de sus integrantes del grupo superan los cuarenta. Los que se negaron a despojarse de la ropa fueron Julián Gil, Pedro Prieto y Ferdinando Valencia. Por hoy es todo, nos vemos la próxima semana aquí dónde quizá hablemos de ti. Opina en @gilbarrera

 

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