Todos somos Charlie

OPINIÓN 08/01/2015 05:00 Actualizada 05:00

Ayer fue un día que quedará marcado en la historia del periodismo. Por un lado, el terrible ataque terrorista que sufrió el irreverente semanario fránces Charlie Hebdo, en París, por publicar un cartón que ofendió al extremismo religioso. Doce muertos fue el resultado de la tragedia, y también la reacción inmediata europea para manifestarse en la calle, en las portadas de los diarios y desde la tribuna de los gobiernos para condenar la intolerancia, venga de donde venga.

La reacción en las redes sociales ocurrió bajo la bandera del hashtag #JeSuisCharlie, que en francés significa "Yo soy Charlie" y que en español entendemos como: "Todos somos Charlie", donde escritores, periodistas y caricaturistas de todo el mundo levantaron la pluma en señal de protesta. La defensa de la libertad de expresión fue la respuesta a este ataque que puso en jaque a Europa, la libertad nunca había estado tan amenazada. Horas más tarde, las instalaciones del diario español El País fueron desalojadas debido a una amenza de bomba que a la postre resultó ser falsa.

Este atentado terrorista, el más grave en los últimos 40 años en Francia, se suma a la lista de los ocurridos en la estación de Atocha, de Madrid, en marzo de 2004 y al ataque a las Torres Gemelas de Nueva York, en septiembre de 2001. Todos realizados en nombre de la Yihad.

Y de este lado del mar, en México, ayer nos enteramos del lamentable fallecimiento de Julio Scherer García. Quizá el más grande periodista de la segunda mitad del siglo XX. Apenas se había cumplido un mes, el pasado 3 de enero, del fallecimiento de Vicente Leñero, otro grande, y también compañero de batallas de Don Julio, desde aquellos días en que manejaron el periódico Excélsior. Proyecto que se vio truncado en julio de 1976 por parecerle incómodo al entonces presidente Luis Echeverría; en ese entonces, Excélsior era considerado uno de los cinco mejores periódicos del mundo. Como consecuencia de la censura surgió el semanario Proceso.

La situación actual del periodismo en México no es muy halagadora, en el índice de libertad de expresión, derechos civiles y políticos en el mundo que elabora la organización Freedom House nos coloca como un país parcialmente libre, en la media de tres categorías. Esto debido a la violencia contra comunicadores y posterior impunidad, pese al compromiso del secretario de Gobernación, Osorio Chong, realizado a esta organización en agosto del año pasado. Esta generación de periodistas tiene, tenemos, una responsabilidad histórica con los lectores, en la defensa de la libertad de expresión puede irse la vida.

 

Periscopio. Mientras el gabinete del gobierno federal se mantendrá sin cambios o al menos eso dijo el vocero Eduardo Sánchez, en el Congreso de la Unión ya comenzó la temporada de solicitudes de licencia en el PRI para buscar nuevos cargos de elección popular. En Nuevo León, los diputados Jorge Mendoza y Pedro Pablo Treviño contenderán por la candidatura tricolor para gobernador junto con las senadoras Marcela Guerra, Cristina Díaz y Liliana Álvarez. Mientras que Antonio Barba y Sergio Armando Chávez buscarán gobernar Guadalajara con miras a lograr la gubernatura de Jalisco en 2018.

 

En el radar. Sorpresiva, la renuncia del senador Mario Delgado al PRD para integrarse a la Morena de López Obrador. Su salida merma aún más al partido del sol azteca, que ha tenido bajas importantes en los últimos meses. Esta situación se verá reflejada en el porcentaje que obtengan los amarillos el primer domingo de junio en las urnas. Delgado llega a su nuevo partido con el gran pendiente de las cuentas de la Línea 12 del Metro, como una mancha en el partido que, a decir de su carísmatico líder, pretende salvar a México.

 

Twitter: @LeoAgusto

Comentarios