EL MODELO de cacicazgo de José Luis Abarca en Iguala, Guerrero, se ha replicado en el municipio mexiquense de Tecámac en la persona de Aarón Urbina Bedolla, quien ha sido presidente municipal en tres periodos. En su primer trienio, el cabildo le autorizó usar un millón de pesos diarios para gastarlos de manera discrecional en beneficio de la gente. Las actitudes mesiánicas de convertirse en el proveedor de un pueblo le hicieron acreedor al mote "El Santaclós de Tecámac".

Urbina es propietario de varios negocios en este municipio que funciona como ciudad ‘dormitorio' de miles de personas que trabajan en la ciudad de México; su hijo aparece como dueño de la tienda departamental Ö Store.

Los ingresos de Urbina de los últimos 18 años como servidor público no cuadran con la cantidad de negocios y propiedades que tiene el hoy el candidato a presidente municipal que podría quedarse en el poder hasta el 2024, gracias a la reforma electoral.

Urbina Bedolla es lo que algunos consideran como un ‘chapulinzote'; ha ‘brincado' de la presidencia municipal al Congreso mexiquense desde hace 18 años; ha militado en el PAN, en el Verde y en el PRI. Ahora, Urbina busca ser alcalde por cuarta ocasión y construir con dinero público su candidatura a gobernador del Estado de México. Muy cercano al gobernador Eruviel Ávila, fue coordinador de la bancada del PRI en el Congreso Local y sacó las iniciativas impulsadas por el gobernador. Urbina y Ávila creen que la debilidad del presidente Peña permitirá a Eruviel designar a su sucesor.

Y en los juzgados están ‘congeladas' las demandas contra Urbina por fraude inmobiliario, despidos injustificados y masivos en el Congreso del estado de México. Existe una orden de aprehensión en contra de Urbina Bedolla por el delito de fraude en contra de tres mil familias.

Dicha orden de aprehensión lo hace inelegible como candidato. Pero la respuesta del alcalde interino, Vicente Urbina, fue amenazar, utilizando a la policía municipal, a los afectados por el fraude inmobiliario organizados en el Frente de Vivienda Digna. Mientras tanto, el ‘sultán' sigue en campaña. De los negocios de Urbina Bedolla con Germán Ávila Villegas, hermano del gobernador del estado de México, hablaremos en otra ocasión.

Periscopio. A la perredista Dinorah Pizano le urge un despertador. A un mes de las elecciones, la candidata a la jefatura delegacional en Benito Juárez no se deja ver por ningún lado. Su campaña electoral es de muy bajo perfil, después de que defendiera ‘como fiera' su candidatura en el proceso interno. Las malas lenguas cuentan de un pacto entre el PRD capitalino y Jorge Romero para dejar libre la vía en Benito Juárez, a cambio de que el PAN en el DF no mueva la estructura en Miguel Hidalgo para facilitar la elección de Víctor Hugo Romo, como diputado, y David Razú, en la elección para jefe delegacional. En el arreglo pudo haber muchos ‘kilos de por medio' para Pizano, de esos que mencionan los candidatos panistas en las conversaciones filtradas. Dinorah se tomó unas vacaciones en Semana Santa, al tiempo que otros aspirantes perredistas estaban encerrados en su ‘cuarto de guerra' afinando la estrategia.

En el radar. En Movimiento Ciudadano, algunos no están contentos con la llegada de Marcelo Ebrard y sus secuaces. Muchos militantes que traían trabajo de base fueron excluidos de los procesos de selección de candidatos. Algunos se irán muy pronto a Morena. Mientras, Marcelo se fue a reflexionar a Europa respecto al oscuro panorama político que tiene frente a sí.

Bitácora de lo absurdo. "Aquí habré de estar con mi amigo, con mi vecino, Aarón Urbina Bedolla, inaugurando estas Plazas Estado de México. Un gran presidente municipal, gran amigo mío, Aarón Urbina": Eruviel Ávila Villegas, candidato a gobernador del Estado de México. 2 de junio de 2011.