Binoculares

OPINIÓN 06/02/2015 05:00 Actualizada 05:00

De lejitos

A 20 días de abandonar su cargo para que se le investigue por el conflicto de intereses que salió a la luz tras un accidente, el ex jefe delegacional de Iztapalapa, Jesús Valencia, optó por no acudir a la cita que tenía ayer en el Ministerio Público. Después de una serie de contradicciones para tratar de justificar el uso de vehículos de lujo que supuestamente fueron ‘prestados’ por contratistas de la demarcación, Valencia envió a sus abogados a la audiencia alegando que este es un derecho de cualquier ciudadano. No vaya a ser que después se descubra que los abogados también fueron facilitados por algún conocido del ex jefe delegacional, quien al parecer ni se preocupa por el escándalo en el que está involucrado.

Muy dolida

Quien busca cobrarse una afrenta es la ex vocera presidencial, Alejandra Sota, que mantiene vigente una demanda contra una revista estadounidense. La encargada de Comunicación Social durante el sexenio de Felipe Calderón, solicita una indemnización de 75 mil dólares debido a que la publicación la incluyó en una lista de personajes corruptos en la que figuraban gobernadores y líderes sindicales como la maestra Elba Esther Gordillo. Ante esto, Sota mantiene viva la demanda desde el año 2013 y asegura que no cederá hasta que la revista le pague por el daño que provocó a su reputación.

Impunidad

Donde la seguridad brilló por su ausencia fue en la ciudad de Matamoros, Tamaulipas, pues el director del periódico ‘El Mañana’, Enrique Juárez Torres, fue secuestrado por un grupo de hombres armados, quienes lo retuvieron, golpearon y amenazaron de muerte, antes de dejarlo en libertad. Sus captores entraron hasta las instalaciones del diario, cuyos directivos solicitaron que las autoridades no ignoren el caso.

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