LÓPEZ OBRADOR llegó fortalecido políticamente al templete montado en la Plaza de la República del Monumento a la Revolución, donde sumó apoyos de perredistas a su proyecto electoral. La adherencia al Acuerdo de Unidad Nacional por parte de la maestra Ifigenia Martínez, fundadora del PRD junto con Cuauhtémoc Cárdenas, Porfirio Muñoz Ledo y otras figuras de peso histórico, es una muestra de congruencia política con la propia ideología ante la alianza entre PAN y PRD, no un ‘cheque en blanco’ al candidato presidencial de Morena.

Una lectura similar merece la incorporación de René Bejarano y Dolores Padierna, independientemente si se afilian a Morena o no; ambos políticos renunciaron al PRD, luego de 30 años de militancia. La decisión no fácil de tomar, pero el pataleo de Ricardo Monreal aceleró el éxodo de esta corriente perredista que llevaba meses negociando su incorporación al partido. Es evidente que a este par de personajes de la izquierda mexicana, Bejarano y Padierna, en poco les beneficia electoralmente una alianza PAN-PRD en la Ciudad de México, donde su ‘tribu’ tiene su base clientelar y Acción Nacional representa poco en las urnas fuera de las delegaciones que ha gobernado históricamente; Miguel Hidalgo y Benito Juárez.

En “la Esperanza de México” se volverán a encontrar los senadores Miguel Barbosa y Dolores Padierna, luego del agarrón que se dieron hace unos meses por la coordinación parlamentaria del PRD en el Senado. Barbosa fue destituido luego de expresar su simpatía por la candidatura de López Obrador. Con altura de parlamentaria, Padierna acusó a Barbosa de ser un “cuentachiles”, mientras que Barbosa, luego de amenazar con “destruir” a Padierna, impugnó su destitución ante el Tribunal Electoral Federal y fue desechada. Después, Padierna anunció que “haría las paces” con Barbosa, pero la ruptura fue definitiva. Ahora, recordando palabras de Nikita Jrushchov, ambas posturas prometerán construir puentes ahí donde no hay ríos.

No sería extraño que el PRD señalara un “efecto cucaracha”. Morena se torna en refugio de cuadros que poco han manchado el servicio público, como el ex gobernador de Michoacán, Leonel Godoy, que generó la situación de inseguridad que hoy se vive allá y Víctor Hugo Romo que con sus fiestas en la Rotonda de las Personas Ilustres y malos manejos en la Miguel Hidalgo, ofrece votos a cambio de impunidad, una vez que se le termine el fuero. ¿Cuándo se encontrará Romo con Xóchitl Gálvez, ya que la hidalguense ofreció su respaldo a la candidatura de Sheinbaum? Cambio verdadero para que todo siga igual, es la oferta que persiste.

Periscopio. Inició el periodo ordinario en la Cámara de Diputados y Claudia Sheinbaum fue arropada por la bancada de Morena en la reunión previa. La coordinadora Rocío Nahle mandó saludos a “Claudia” desde la máxima tribuna en San Lázaro en Sesión de Congreso General. Más tarde, el senador zacatecano Carlos Puente contestó en su intervención a nombre del PVEM: “Aquí hubo quien vino a saludar a Claudia, yo también saludó a Claudia, pero también le mando un saludo a mi paisano Ricardo Monreal”, invitación explícita de un partido al que le urge candidato. 

En el radar. Sin rivales fuertes visibles al interior del PRD, Víctor Hugo Lobo, delegado en Gustavo A. Madero, se destapó para la candidatura al gobierno de la Ciudad de México. Ahora falta ver la carta del PAN para los respectivos careos en encuestas y determinar así a quien abandere al llamado Frente Amplio Democrático. Ayer, el PRD aprobó en su Consejo Nacional apostar al FAD, aunque no es garantía de que se concrete una alianza entre ambos partidos, ya que el PAN vive una crisis institucional profunda. 

Bitácora de lo absurdo. Ricardo Monreal se queda sólo en su delirio por convertirse en candidato y próximo gobernante de la Ciudad de México. Ayer, en el evento de López Obrador en el Monumento a la Revolución se vio muy sonriente a su hermano, el senador David Monreal, con su jefe de bancada Manuel Bartlett. 

Twitter: @LeoAgusto