Ese mismo día, por la noche, su pareja, de nombre Guillermo, llamó a la familia de Jonathan para decirles que el joven de 24 años había desaparecido.

Jonathan es oriundo de Huixquilucan, Estado de México, y tenía algunos meses que se había mudado a Metepec, por el trabajo. Visitaba a su familia los fines de semana. Desde que desapareció, ese mismo viernes, su familia no ha dejado de buscarlo.

Sin embargo, no han recibido apoyo por parte de la fiscalía, acusa su hermana Karla. “En la fiscalía no estaban haciendo nada, sólo nos daban como largas”. 

Entonces, la familia solicitó apoyo de la prensa y en cuanto el caso comenzó a salir en algunos medios locales, en la fiscalía se movilizaron, aunque no ha servido para más. “Las cosas siguen igual. Hay un sospechoso, lo citan y lo citan y no se presenta. Hasta ahorita estamos esperando a ver qué nos dicen”.

La familia teme que alguien le haya hecho daño a Jonathan, ya que no encuentran razón alguna por la que se ausentara de forma voluntaria. Algunos mencionan haberlo visto por el centro de la delegación Iztapalapa, como vagabundo. “Nosotros no creemos que sea así”, explica Karla. 

En primer lugar, Jonathan es un joven sano, sin adicciones; y en segundo lugar, porque requeriría muchos meses para que una persona sana pasara a ser un vagabundo en la calle.

El 5 de septiembre, diez días después de la desaparición, la familia recibió una llamada desde el celular de Jonathan. Era la voz de un hombre —que aseguró ser Jonathan—, dijo que ya no lo buscaran. Después de esa llamada, el teléfono ha permanecido apagado. Karla no cree que se haya tratado de su hermano. O si bien fue él, quizá habría sido obligado a llamar.

La familia no sabe qué pensar. Pero simplemente no cree que se haya ausentado voluntariamente. Y pasan los días, sin ayuda.

La pareja de Jonathan ha sugerido que éste se encontraba deprimido. Habló de que quizá quería alejarse o terminar con su vida. Habló a la hermana de que Jonathan tal vez habría regresado a Huixquilucan, a un paraje que llaman Piedra de la Luna, un lugar que algunas personas creen que tiene algún tipo de poder energético, lo utilizan para hacer limpias y cosas así. De nuevo, la familia no cree que ese sea el caso. Lo difícil, sin embargo, es que la fiscalía no está buscando. Sólo la familia lo hace.

GLOSARIO DE SUPERVIVENCIA: Desaparecidos: Días sin descanso.