Acapulco: corrupción e inundaciones

OPINIÓN 02/10/2013 05:00 Actualizada 05:00

Funcionarios municipales y estatales de Guerrero, así como desarrolladores inmobiliarios son investigados por otorgar permisos y construir viviendas sobre lechos de ríos y arroyos cuyo cauce fue desviado, incluso en el área de una laguna, que por razón natural, son zonas inundables o humedales.

Fue David Kofrenfeld, director de la Conagua, quien reveló el viernes pasado, en una de las muchas reuniones de evaluación que encabezó el presidente Peña Nieto en Acapulco, que en la zona Diamante, severamente inundada al paso de la tormenta Manuel, se desviaron y/o bloquearon por lo menos tres drenes del río Colacho, que era uno de los nueve ríos principales dentro de la subcuenca de Acapulco que desahogaban el agua de lluvia hacia el mar.

En el lecho de uno de esos cauces desviados fue donde se construyó, por ejemplo, la colonia Ciudad Colosio, una de las más afectadas en la zona Diamante. Otro dren, éste cancelado, era un canal meándrico cercano a Puerto Marqués que drenaba hacia la laguna Negra. Un tercer bloqueo se hizo en el canal meándrico ahora conocido como Geo, acaso en referencia a una de las constructoras.

Miles de viviendas, muchos hoteles y centros comerciales, así como carreteras, fueron construidos en terrenos cuya vocación natural es dar cauce a flujos pluviales. Para construir la carretera que une al aeropuerto internacional con la zona Diamante de Acapulco, se levantó un dique, un terraplén de poco más de un metro de altura que también impidió al agua de lluvia fluir de las montañas hacia el mar como durante años lo hizo de manera natural.

El subdirector técnico de la Conagua, Felipe Arreguín, explica: “Hicieron grandes desarrollos de habitaciones, de todos niveles, para clase media y para clase alta y ellos dicen que cuentan con los permisos”.

¿Quiénes expidieron esos permisos? La invasión de la periferia del puerto empezó en 1995. Las primeras colonias que se fundaron en la famosa zona Diamante fueron la Luis Donaldo Colosio, Princess del Marqués I y Princess del Marqués II. Para ello el ayuntamiento debió autorizar el cambio de uso de suelo. De 1993 a 1995 tocó hacerlo al presidente municipal priísta Rogelio de la O. Almazán; después vino el también priísta Juan Salgado Tenorio, quien dejó el cargo en 1997 tras el golpe del huracán Paulina junto con su director de Protección Civil, Efrén Valdés, quien hoy ocupa el cargo nuevamente; y más adelante el perredista Zeferino Torreblanca (1999-2001), quien avaló la construcción en esas zonas de humedales de las unidades habitacionales La Marquesa y Las Gaviotas.

¿Y a quién se dieron esos permisos? Pues, entre otros, a Casas Geo, de Luis Orvañanos, inmobiliaria a la que entre otras cosas se le autorizó que vertiera 360 millones de litros de aguas negras al río La Sabana; a Desarrolladora Homex, de Gerardo de Nicolás; al Grupo ARA y SARE, algunos de ellos al borde de la quiebra por la crisis inmobiliaria.

La Conagua aseguró que en 10 días habrán reconstruido exactamente lo que pasó y darán a conocer el estudio para que se deslinden responsabilidades.

Instantáneas

1. RECHAZO. Crece entre el sector privado y las clases medias el rechazo a la reforma hacendaria planteada por el gobierno de Peña Nieto. Los empresarios la consideran recesiva y los sectores medios se niegan a seguir siendo los causantes cautivos a los que siempre se les carga la mano.

2. PREOCUPACIÓN priva entre los profesionales de la contaduría pública. La propuesta de eliminar el dictamen para efectos fiscales contenida en la iniciativa de marras, afectaría severamente a ese grupo de profesionales. Ya le contaré.

3. NO SE OLVIDA. Hoy se cumplen 45 años de la matanza de estudiantes de Tlatelolco ocurrida el 2 de octubre de 1968. A los grupos sociales y organizaciones políticas que año tras año recuerdan a los muertos de ese trágico episodio de la vida nacional, se sumarán ahora los maestros de la CNTE, que siguen movilizados en la ciudad de México.

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