Desde el 7 de abril de 1950, se celebra cada año el Día Mundial de la Salud, con el fin de enfocar la atención de todo el mundo, sobre un tema de salud relevante y de gran trascendencia para la humanidad.

En el 2013, el Día Mundial de la Salud tiene como tema el control de la hipertensión y se invita a todos los países a difundir mensajes claves que ayuden a la población a entender la gran magnitud del problema de salud y cómo enfrentarlo.

El problema

En el mundo ocurren por lo menos 9.4 millones de muertes al año, asociadas a la hipertensión arterial. En México, se estima que diariamente fallecen 267 personas de causas relacionadas con la presión arterial alta, entre ellas: 129 por enfermedades del corazón y 45 por enfermedades cerebrovasculares. La hipertensión lleva a la muerte por sus complicaciones: ataques cardiacos, hemorragias y embolias en el cerebro, insuficiencia renal, hemorragias de grandes arterias que llevan la sangre al abdomen, pelvis o las piernas. Otras complicaciones importantes y que causan discapacidad son: ceguera, mala circulación en las piernas y disfunción cerebral.

En México, uno de cada tres adultos de 20 y más años tiene hipertensión. A medida que aumenta la edad aumenta el riesgo de desarrollarla y la mayor frecuencia de presión alta se encuentra después de los 60 años, donde hasta 6 de cada 10 adultos mayores la padecen. Muchas veces la hipertensión no provoca ningún síntoma hasta que es demasiado tarde y se manifiesta a través de sus complicaciones. En México, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud (ENSANUT) 2012, sólo el 30.6% de las mujeres y 26.2% de los hombres de 20 y más años acudieron a revisar su presión en el último año; 15% de mexicanas/os ignoran que son hipertensos porque no se han hecho la detección y hasta 3 de cada 10 personas que se saben con presión alta no se tratan la enfermedad.

La solución

La hipertensión es prevenible y con un tratamiento adecuado se controla para evitar sus complicaciones, muerte prematura o mala calidad de vida por discapacidad. Para prevenir la enfermedad, todas las personas incluyendo los niños/as deben reducir el consumo de sal, tener una dieta equilibrada, hacer ejercicio regularmente, mantener un peso adecuado, evitar el consumo nocivo del alcohol y no fumar.

Otra medida importante es la detección temprana, en México la normatividad recomienda la medición de la presión arterial cada año a partir de los 30 años o desde los 20 años si se tiene diabetes, sobrepeso u obesidad. Las cifras que se consideran hipertensión son por arriba de 140/90.

El tratamiento de la hipertensión arterial debe siempre combinar los medicamentos con la educación y apoyo para eliminar las adicciones, llevar una dieta sana y baja en sodio, hacer ejercicio y manejar el estrés; es necesaria también la medición de la tensión arterial y la visita médica periódicas.

La Organización Mundial de la Salud enfatiza que la sociedad civil tiene una función importante en la lucha contra la hipertensión y que la contribución de la industria puede ser enorme reduciendo la sal en los alimentos procesados.

No lo dejes para después, ya es tiempo de revisar tu presión arterial.

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