Ecatepec, el más violento

OPINIÓN 01/04/2015 05:00 Actualizada 05:00

Según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, Ecatepec tuvo una tasa de homicidios de 35.9 por cada 100 mil habitantes en 2014. El triple de la media nacional, y por encima de las tasas de homicidios de ciudades como Matamoros, en Tamaulipas; Apatzingán (35.5) o Lázaro Cárdenas (28.5), en Michoacán.

Ecatepec es el municipio más poblado del país, con 1 millón 688 mil 258 habitantes; esta región que tenía una vocación más bien agrícola a inicios del XX -a pesar de su tierra salitrosa-, se convirtió en sede industrial y luego cobró una vocación de ciudad ‘dormitorio' para satisfacer las necesidades de la explosión demográfica en el Distrito Federal.

Con el tiempo, su territorio ha conseguido tener otros privilegios: paso casi obligado del Distrito Federal con rumbo a Pachuca, nudo de vialidades y carreteras que lo comunican con municipios y entidades vecinos, conectado a la red férrea, atravesado por un río que escupe las aguas negras generadas en la ciudad.

Así, el municipio se urbanizó de forma salvaje y caótica, y esa cualidad desordenada, aunada a su enorme población, la cercanía al Distrito Federal, su accesibilidad y conexiones, han propiciado todo tipo de actividades informales, baja calidad de vida, asentamiento del crimen organizado. Se habla de la presencia de al menos tres cárteles del narcotráfico. ¿Por qué es tan atractivo Ecatepec? ¿Serán las rutas carreteras, el tren, la cercanía, la industria, el cobro de ‘piso'?

La expresión más violenta es la tasa de asesinatos en Ecatepec, pero se suma la violencia de género, traducida en desapariciones y asesinatos de mujeres, en su mayoría jovencitas. Esto último tampoco es aleatorio. Desde hace dos años se habla de al menos una banda del crimen organizado (comandada por un ex militar que actualmente se encuentra detenido por el feminicidio de Bianca Edith Barrón) dedicada al secuestro, violación y asesinato de muchachitas.

¿Qué requiere Ecatepec? ¿Cómo puede revertirse este proceso de descomposición y muerte? ¿Qué requiere Tecámac, Chimalhuacán, y ya en el DF, ‘El Hoyo' en Iztapalapa y la decena de barrios marginales que en este momento se escapan de la memoria? ¿Dónde están las propuestas de candidatos para coordinar proyectos que realmente abatan la violencia y eleven la calidad de vida?

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