Ariel, La Infiel
Salí del salón de belleza y me estaban siguiendo; me metí a un techo lleno de gente y entonces me di cuenta de que el tipo que me estaba siguiendo era el novio de mi hermana. Encimoso, como siempre, insistió en besarme y me dijo que la que le gusto soy yo no no mi hermana, me fui corriendo y empapada me di cuenta que a mí me encanta él. ¿Se lo debo de contar a mi hermana?
Creo que sí. La química entre las personas se puede volver demasiado poderosa y pretender que no existe es un error. Si ambos se sienten atraídos, sean cuidadosos y sinceros para no lastimar.
Rudo, El Suertudo
Mi novia adora caminar desnuda por la casa; nunca me había sucedido el tener a una mujer totalmente desnuda en la cocina, en el comedor, desnuda ve la tele y camina por el pasillo desnuda. Verla me gusta muchísimo, su naturalidad, su soltura y la seguridad con la que camina. ¿Me preocupo por los vecinos o la dejo ser?
Déjala ser; no le metas tus miedos ni tus preocupaciones. Pocas personas se gustan tanto como para mostrarse orgullosos de su cuerpo y su figura; disfruta que tu pareja sea físicamente tan segura y dile cosas lindas para que lo disfrute y para que siga.
Recota, La Francota
Mi hermana no entiende que soy lesbiana, nunca se dio cuenta de que mi mejor amiga y yo éramos novias, tampoco supo que me agarraba a besos con la vecina y sólo me decía que no entiende cómo nos llevamos, pero que algo se veía mal. A mí me gusta que no lo sepa, pero a la vez siento que lo sabe. ¿Se lo digo?
Soy de las que piensa que las cosas íntimas y obvias no tienen que decirse con palabras. Cuando lo quiera entender lo hará, mientras no lo quiera ver, no digas nada.
Isto, El Masajisto
Soy un masajista de tiempo completo. Mis abuelos cuentan que sus abuelos tenían una fuerza sanadora en las manos, en la energía que transmiten al tocar a los demás con intención sanadora. En mi casa siempre hubo una infinidad de aceites, cremas y fragancias sanadoras. Una de mis mejores amigas me pide masajes y terminamos haciendo el amor por la pura buena vibra de intercambiar energía, pero sabemos que no es un acto de amor; es puro sexo sensual y placentero. Mi mujer no lo sabe, pero yo se lo quiero contar, ¿crees que lo debe de saber?
La complicidad es uno de los ingredientes que tiene una relación sana y divertida, pero no todas las relaciones aguantan ese tipo de confesiones. Valora qué tipo de relación y complicidad tienes con tu mujer; uno debe de trabajar las relaciones para que puedan abrir horizontes y ver más allá.
